martes, 19 de febrero de 2013

Mi vida

Mi vida es un lienzo en blanco
que ha sido escrito por el creador máximo,
y que día a día se va revelando su voluntad.
Mi vida tuvo, tiene y tendrá colores,
unos más claros, unos más opacos,
pero de alguna manera,
teñirán aquel lienzo de las más diversas gamas
con los más distintos colores.
Mi vida está llena de hechos,
de fosos y de montes
que deberé sobrellevar.
Mi vida tiene sorpresas,
tiene humillación, vergüenza, timidez,
pero siempre serán aguantables,
porque la vergüenza limita
y yo,
no quiero ser un hombre limitado.
Mi vida tiene alegrías,
pucha que tiene alegrías mi vida,
también tiene tristezas,
no obstante,
lo que sirve para esta existencia carnal
es el contentamiento que uno tiene
de ser quien es,
sin necesidad de cambiar conforme a la situación
y tener un alma distinta a los demás,
exenta de creer que los demás tienen la razón,
y buscar la verdad
de por qué somos humanos
que creemos sin saber,
que miramos sin ver,
que hablamos sin platicar,
que fuimos hechos para adorar.
Ya no me avergüenzo de ser quien soy,
porque el ser humano critíca
y no deja crecer a quien está siendo superior
sino que lo baja para que crea que es inferior
para poder así alzarce como un buitre
que despojan de carne los cadáberes que estan en el desierto,
porque hacen creer que en
esta vida,
donde mi vida está insertada,
hay que ser individualista.

viernes, 8 de febrero de 2013

Mujer, ¿aló?

Mujer, ¿Por que?
¿Por qué debo amarte?
¿Por qué debo sentir esta atracción por ti?
¿Acaso eres la única que no se dá cuenta que mi afecto por ti es gigante?
Te acabas de dar cuenta,
no me quieres,
acaso...
¿la pasión que te entregué
no fue lo suficiente para
una reina de un cuento de fantasía como tú?
¡Por qué!
¿Mujer!
yo que dí todo por ti,
y tu te fijas en el hombre
que te ilusionó falsamente,
y que te trató bien al principio
pero que se convirtió en un az de doble cara,
que lo único que hace es mentirte.
Te espero, te quiero,
aún así, votandome y humillandome
sólo,
te amo,
¿Por qué lo sigo haciendo?
No lo sé,
no lo entiendo,
no lo comprendo,
no lo puedo inferir.
Amor, ¡por qué exístes!
y por qué
debo amarte a ti,
¡a ti mujer!
cómo no descifras
aquel código que escribí,
¡cómo!
Mujer,
percíbe mi amor,
que no te lo dará otro hombre
como aquel que escribió esto,
como aquel a quien enamoraste,
como aquel que te mostraste como eres
y que a pesar de todo,
te ama.
¿Entiendes?
Al parecer,
no eres ser humano.